El fútbol es una forma de ocio y diversión para millones de niños en todo el mundo y los que somos padres conocemos la ilusión que a los pequeños les hace cada temporada el momento el que se hacen con sus ropas de juego y entrenamiento o las botas. En Marianssport.com llevan muchos años ofreciendo este tipo de productos a nivel nacional e internacional y saben de lo importante que es para los niños jugar en equipos y hacerlo con materiales de calidad. Un país que invierte mucho en el fútbol es Estados Unidos, que tiene una gran cantidad de niños en edades formativas que optan por el “soccer” como ellos llaman.
¿Qué situación hay en Estados Unidos?
Los veranos tienen en Estados Unidos olor a soccer, pues millones de niños lo practican, pero este deporte convive con otros tres deportes que le superan en importancia. Béisbol, fútbol americano o baloncesto son los que mandan y los otros parecen estar destinados a ser simple ocio.
En la MLS con su gran presupuesto han ido haciendo una liga en la que algunos jugadores de nivel llegan dispuestos a dar caché. A ello se ha sumado la gran influencia latina que proviene de jugadores mexicanos y centroamericanos, que han hecho que la liga tenga competitividad, pero sin llegar al nivel de las más importantes competiciones europeas.
En este sentido cobra importancia la labor de los equipos en sus categorías inferiores, pero parece que todo evoluciona a un ritmo lento, más de lo que les gustaría a los promotores de la Mls y a los enamorados al soccer de aquel país.
En las MLS los equipos son clubes y no franquicias, por lo que hay un sitio para que desarrollen sus categorías inferiores. A pesar de esto no son tantos los casos en lo que los equipos llegan a tener categorías inferiores de menores de 15 años.
Dicho esto, ¿cómo es la forma en que desarrollan sus habilidades futbolísticas los más pequeños?
En Usa existe un sistema donde clubes y escuelas sin equipo en la MLS trabajan conjuntamente para que los jóvenes sigan jugando. Entre los meses de marzo y octubre, con una parada en junio, muchas de las escuelas, paran su actividad deportiva y aquí en cuando los complejos deportivos realizan actividades de soccer u otros deportes.
Donde el soccer es la principal actividad, por lo general reciben unos 1.500 niños que llegan para entrenar y pasarlo bien en un deporte que los padres no llegan a ver como una futura fuente de trabajo futuro.
Los clubes son privados y la cuota de la temporada es de unos 1.600 dólares, por lo que no todo el mundo puede tener acceso. Las instituciones alquilan las instalaciones a universidades u otra clase de entidades. Al acabar la temporada se cierran las puertas.
La gran cantidad de niños y jóvenes que lo practican, mayormente latinos, termina haciendo que los entrenadores lleguen a juntar hasta 3 equipos por cada categoría, diferenciándose por el nivel que tengan a la hora de jugar.
Lo curioso de la práctica del fútbol allí es que los niños no suelen ver fútbol en TV y en lugar de llevar la camiseta de su jugador de fútbol favorita o charlar sobre fichajes o resultados, lo pasan bien jugando al fútbol y llevando ropa de la NBA o de equipos de béisbol.
Los clubes organizan torneos regionales a fin de fomentar la competencia
Normalmente los padres optan por el fútbol al proporcionarles un entrenamiento completo y así evitar que elijan otras prácticas o deportes más peligrosos como el fútbol americano.
A nivel tecnológico allí todo está muy avanzado, puesto que suelen tener las competiciones apps para teléfonos móviles donde se informa convenientemente sobre el calendario, la temporada, plantillas, rivales y equipos.
La influencia de los latinos suele ser determinante en los equipos infantiles
Son una serie de campeonatos donde divertirse es el principal de los objetivos, los fanáticos no tienen lugar alguno. Los entrenadores son los que más inciden en temas como el fair play, algo que se lleva a rajatabla en los clubes y los padres.
Por lo general los familiares de los niños ven los encuentros en las gradas, aunque no se vive con la euforia de otros sitios del mundo, lo que hacen es pasarlo bien sabiendo que los niños lo pasan realmente bien.
Los clubes entrenan dos veces y juegan un partido a la semana
Los directores de los equipos hacen dos veces de manera anual un detallado informe sobre cada uno de los jugadores en donde se hace un resumen de su trayectoria, para así justificando lo que puede ser un cambio de equipo dentro de la categoría, tanto si mejora como si se estanca. Todos estos documentos a la vez los comparten las escuelas.
Este sistema lo pueden llegar a usar los futbolistas para ir creando futbolistas y que al final Estados Unidos sea una verdadera potencia mundial, que en lugar de ser solo un deporte que divierta y punto, pueda llegar a formar a más profesionales de los que hay ahora.
El caso es que aunque los niños suelen con ser futbolistas, a la hora de la verdad el estado de la competición los iba a frenar. Actualmente tiene algo más de 20 equipos, poco para un país con más de 320 millones de habitantes.
Todo esto, si lo sumamos a las estrellas que todos los años suelen llegar a esta liga, se lo ponen complicado a los niños para que puedan ser futbolistas profesionales en la MLS. Así que, aunque el sistema esté estructurado y cuente con una buena organización a la hora de la verdad y de cara al desarrollo del fútbol profesional, cuesta bastante que aparezcan los resultados que se buscan.
Esperemos que desde la MLS sigan encaminándose a la apertura de más equipos como tienen planteamiento de hacer en los próximos años y otras competiciones como la NASL (un equivalente a la segunda división) sigan creciendo.